La controversia acerca del impacto negativo de la de la consultora Zippia asegura que, aunque es cierto que la automatización puede eliminar puestos de trabajo, se está abriendo un horizonte de oportunidades que podría resultar en la creación de hasta 58 millones de nuevos empleos.
La automatización está transformando la forma en que operan las industrias en todo el mundo, pero también está generando una demanda creciente de habilidades especializadas en tecnología, gestión de datos y colaboración con sistemas inteligentes. Expertos afirman que, a medida que ciertos trabajos rutinarios son asumidos por la automatización, los seres humanos se enfocarán cada vez más en tareas que requieran creatividad, toma de decisiones complejas y habilidades interpersonales.
Leandro di Nardo, director de NUMAN, comenta al respecto: «La transición hacia una economía más automatizada es un proceso complejo que exige una adaptación tanto de los trabajadores como de las empresas». Este cambio fundamental en el mercado laboral no solo exige la adquisición de nuevas habilidades, sino también una reevaluación de cómo los seres humanos y las máquinas pueden trabajar juntos de manera más efectiva.
Una encuesta realizada por YouGov para el Handelsblatt Research Institute y TeamViewer arrojó datos alentadores. El 70 por ciento de los directivos consultados considera que la Industria 4.0 y la transformación digital mejorarán las condiciones laborales. Además, el 82 por ciento de ellos vinculó el uso de tecnologías innovadoras en la producción con un aumento de la eficiencia, y el 81 por ciento cree que las nuevas tecnologías mejorarán la calidad del servicio y reducirán costos.
Según datos del «Foro Industrial 2023: Fortaleciendo la manufactura en Colombia de NUMAN», el factor humano sigue siendo esencial para la implementación exitosa de las tecnologías y contribuye a superar la resistencia al cambio que a veces se encuentra en las organizaciones. Además, la entrada de jóvenes al mercado laboral trae consigo una educación más orientada hacia la tecnología, lo que eventualmente obligará a las organizaciones a adoptar las nuevas tecnologías de manera más amplia.
Leandro di Nardo subraya: «Las habilidades humanas, como la creatividad, el pensamiento crítico, la inteligencia emocional y la capacidad de adaptación, siguen siendo fundamentales en el entorno empresarial. Estas son características que las máquinas no pueden igualar. Por lo tanto, se requerirá de nuevos talentos y profesionales para acompañar este proceso a largo plazo».