Durante el primer panel de la Cuarta Cumbre de Inteligencia Artificial Colombia, tuvo lugar una conversación acerca del impacto de las tecnologías emergentes en el mundo del trabajo, una de las principales preocupaciones actuales de los colombianos. Participaron en este panel Camilo Barrera, CEO de Robotika, compañía importadora de robots industriales; Iván Rojas, gerente de diversidad e inclusión del Banco de Bogotá; Jorge Cortés, vicepresidente de la Central Unitaria de Trabajadores, CUT; y Alejandro Santos Rubino, director de contenidos en PRISA Media, a cargo de la moderación.
Para Iván Rojas, gerente de diversidad e inclusión del Banco de Bogotá, la IA aplicada en los procesos de selección, permite eliminar sesgos inconscientes, así lograr procesos más efectivos y personalizados. “Con IA podemos entender al colaborador y aprovechar otros beneficios como la inclusión de la población discapacitada. Hoy en Colombia hay más de tres millones de personas con discapacidad, desde el banco estamos buscando que puedan acceder a productos financieros”, explicó Rojas.
Agregó, que el cambio es posible y el ser humano puede adaptarse a nuevas herramientas siempre y cuando tome la decisión personal de hacerlo. “Ser rebeldes y asumir cada profesión con transformación es lo que nos permite adoptar rápidamente nuevas tecnologías”, indicó.
Por su parte, Jorge Cortés, vicepresidente de la Central Unitaria de Trabajadores, aseguró que desde el gremio ven con profunda preocupación el tema de la automatización y la adopción de IA en un país con tantas falencias como Colombia, donde las brechas son muy grandes. “Muchos colombianos ni siquiera terminan su primaria y mucho menos llegan a la universidad, creemos que este fenómeno si afecta al empleo y lo hemos visto en los bancos desolados de trabajadores. Debe haber un cambio profundo de la educación, la escolástica tiene que morir y debe priorizarse el sentido crítico y educativo”, dijo el líder sindical.
Para el representante de CUT, en un sector educativo que no modifica sus estructuras, los cambios serán lentos y en ese contexto se presentan las falencias, porque los trabajadores requieren de nuevas perspectivas.
Desde la industria, Camilo Barrera, CEO de Robotika, dio un parte de tranquilidad para los asistentes. “No debemos afanarnos en el sentido de que los robots y la inteligencia artificial van a causar un tema devastador en la empleabilidad en Colombia”, explicó.
De acuerdo con cifras de Barrera, a nivel mundial la cantidad de robots que se instalan en el mundo se mide por cuántos robots hay por cada 10.000 trabajadores, en ese sentido los principales países que tienen robots son Singapur, Alemania, Corea y Japón; ellos tienen una tasa entre 800.000 robots por cada 10.000 trabajadores, eso es más o menos un robot por en cada empresa por cada 10 trabajadores. Para Barrera, el hecho de que Latinoamérica no aparezca en las estadísticas indica que los países de la región no están altamente robotizados y en la inmediatez es un tema que afecta mucho la producción.
¿Cómo garantizar los derechos de los trabajadores con los cambios actuales?
Otro tema importante que se trató durante este panel, fue el equilibrio entre los derechos, la flexibilidad y la adaptabilidad de las nuevas generaciones de trabajadores, teniendo en cuenta que sus objetivos y necesidades son muy distintos a los de las generaciones anteriores.
“75 por ciento de las empresas van a modificar su rol y los trabajadores tendrán que jugar en escenarios distintos. Insistimos en que las empresas deben ayudarlos para que puedan llegar al futuro. El avance científico y técnico es en favor de la humanidad, siempre y cuando busque cerrar la brecha que, en Colombia es muy grande”, advirtió Jorge Cortés..
Al respecto, el CEO de Robotika, se remitió al ejemplo de que hoy todo se paga por plataformas y seguramente el cajero como lo conocimos ya no existe, pero si existe todo un desarrollo tecnológico donde hay gran cantidad de ingenieros trabajando desde sus casas y es allí donde está la nueva generación de empleados bancarios.
