Bogotá, 25 de septiembre de 2023 – Las icónicas droguerías de barrio en Colombia están experimentando una transformación radical, gracias a la implementación de la Inteligencia Artificial (IA) en sus operaciones. Estos establecimientos ofrecen una amplia gama de productos, desde artículos de aseo personal hasta productos de salud y belleza. Según la Asociación Colombiana de Droguistas Detallistas, Asocoldro, en el país existen más de 20.000 droguerías, de las cuales el 70 por ciento son independientes y pertenecen a empresas familiares.
Las herramientas digitales se han vuelto indispensables para todo tipo de comercio. Estrategias como la omnicanalidad y el uso de chatbots se han convertido en tendencias clave para las droguerías, ya que permiten ofrecer una atención personalizada a los clientes. Martín Malievac, director de investigación y desarrollo de Napse, destaca que «estamos construyendo un futuro en el que los usuarios buscan facilidad e hiperpersonalización a la hora de comprar. La transformación digital es el camino para brindar un acceso más rápido a la información y ofrecer una mejor experiencia de compra».
Según un estudio de Kantar, las droguerías de cadena llegan al 29 por ciento de los hogares colombianos, mientras que las droguerías de barrio cubren el 81 por ciento de los hogares del país. El ticket (valor de una compra) promedio en las primeras aumentó de 15.880 pesos en 2021 a 29.649 pesos en 2022. En las droguerías de barrio el ticket promedio se comporta de manera similar; aumentó de 15.730 pesos en 2021 a 28.502 pesos en 2022.
En el contexto de las droguerías, la IA está cambiando la gestión de inventarios, al analizar el historial de ventas y los patrones de compra de los clientes habituales. Esto permite mapear de manera eficiente el flujo de productos en la tienda y generar sugerencias de demanda para realizar pedidos finales de forma automática. Esta automatización no solo mejora la eficiencia de la gestión de inventario, sino que también reduce la posibilidad de pérdidas debido a grandes inventarios, según explica Malievac.
La pandemia destacó las limitaciones del sector de las droguerías, incluyendo retos financieros y la falta de infraestructura para atender a más pacientes. Sin embargo, también se convirtió en una oportunidad para la innovación, lo que incluyó la gestión de inventario, la adopción de ventas digitales y la diversificación de productos.
La integración de la Inteligencia Artificial en el campo de la salud representa un avance significativo que promete mejorar la calidad de la atención médica, automatizar procesos, ofrecer servicios más personalizados y gestionar la atención de manera más eficiente. De acuerdo con el Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe, se espera una inversión global de 36.000 millones en IA para 2025.
Adoptar una estrategia sólida y aprovechar la tecnología para simplificar los procesos permiten proporcionar atención personalizada, anticiparse a las necesidades y ofrecer servicios de manera efectiva. En palabras de Martín Malievac, «la IA no solo transforma industrias, sino que también mejora nuestras vidas al poner al paciente y al cliente en el centro de la atención, brindando resultados más satisfactorios y significativos. Esto es particularmente relevante en el contexto de las droguerías de barrio, que desempeñan un papel fundamental en el acceso a productos de salud y bienestar en comunidades locales».