La Inteligencia Artificial empieza a ser recibida de buena gana en el mundo académico, según opina Jimena Llopis, directora del Máster Universitario en Inteligencia Artificial de la Universidad Internacional de Valencia – VIU. «Si bien es cierto que para muchos puestos de trabajo los humanos serán (están siendo) sustituidos, la creatividad de la especie seguramente generará otras formas de interactuar y participar», dijo.
La Inteligencia Artificial está de moda, pero no es nueva. Solo ha aumentado su presencia en las sociedades actuales. De hecho, durante los últimos 23 años ha habido un aumento en la adopción de las IA en campos investigativos de las ciencias físicas, naturales y sociales, según revela el informe de la Organización de Investigación Científica del Commonwealth (CSIRO). El informe encontró que, para septiembre de 2022, 5.7 por ciento de la investigación que revisaron pares alrededor del mundo giró en torno a la IA (frente a un 1,2 por ciento en el año 2000 y 3,1 por ciento en 2017).
La docente explica que muchos estudios han demostrado cómo las IA están facilitando la búsqueda del conocimiento en áreas inimaginables para el ser humano a unas velocidades asombrosas y precisiones, desde escanear el cielo en búsqueda de supernovas hasta encontrar nuevos medicamentos a partir de millones de combinaciones potenciales.
«Cuando se trata de analizar grandes volúmenes de datos, que se escapan de la capacidad del ser humano, la IA juega un papel fundamental», agrega Jimena Llopis.
Sumado a esta gran capacidad de procesamiento de información y el potenciamiento del conocimiento, las IA están contribuyendo a potenciar la transversalidad del conocimiento en campos o disciplinas que normalmente trabajan independientes, separados unos de otros.
«En esta nueva era los “silos” en la academia, las empresas y las organizaciones gubernamentales, y aún más estos mismos “meta-silos”, no podrán por separado afrontar ni potenciar solos los nuevos retos que estamos viviendo, y los que están por venir».