Diana Gutiérrez, consultora experta de Naciones Unidas en asuntos digitales, es una de las voces más destacadas cuando se habla de inclusión, igualdad y equidad de género. Ella estuvo en la 5a Cumbre de Inteligencia Artificial: “Oportunidad de Inclusión y Desarrollo Social”, que tuvo lugar el pasado 27 de septiembre de 2023, en el Movistar Arena de Bogotá.
Entrevistamos a Diana Gutiérrez para hablar acerca de los avances recientes en América Latina y Colombia, en el aprovechamiento de la IA y los algoritmos para el desarrollo social y la reducción de brechas.
IA COLOMBIA: ¿Cuál es el panorama de la utilización de la IA para la inclusión?
Diana Gutiérrez: Indudablemente esta es una de las herramientas más destacadas hoy, y vale la pena decir que no es nueva, pero sí que en los últimos años ha dado un salto exponencial y ha penetrado todas las áreas de la vida. Sin darnos cuenta, podemos decir hoy que está prácticamente en todo lo que usamos a diario.
Aplicaciones de noticias, o las que se usan para conectarnos con otras personas, las redes sociales, las cámaras en las ciudades. Así, el potencial que tiene la IA es inmenso, generando a su vez un gran salto para la humanidad y su cuidado.
Por ejemplo: el mapeo para la creación de escenarios de desarrollo médico es increíble, la IA en la salud está determinando una nueva era; la reducción en los tiempos para la creación de vacunas o para atacar enfermedades. Ya que el análisis de los datos, entre otros temas, es muy rápido.
También, en la lucha contra el cambio climático, ya que la IA aporta a diferentes áreas y puede apoyar la protección de bosques y hasta evitar la tala indiscriminada de árboles. Hay cámaras en este tipo de ecosistemas que se mantienen alertas para informar sobre una tala de árboles y avisar a las autoridades para frenar tales acciones y cuidar el lugar.
De otro lado están las aplicaciones para expandir la inclusión financiera y económica; basadas en IA, se pueden generar mecanismos de medición para que las personas puedan obtener en cuestión de minutos, acceso a un crédito para su progreso.
Y, está el uso de la IA junto a otras tecnologías para determinar identidad digital, con la cual se tiene acceso a múltiples servicios y se provee un impacto positivo al sector financiero.
Creo en el uso de la IA para el bien, pero hay que tener en cuenta que no es la fórmula mágica o la respuesta final que ayudará a solucionar todos los problemas de la humanidad, pero sí que resulta un valioso aporte para sumar soluciones.
IA: ¿Cómo ve la implementación de la IA en el contexto de América Latina?
DG: Recientemente, CEPAL presentó un estudio hecho en 12 países de la región, para conocer cuáles eran los avances de la IA; los resultados arrojaron un avance y que esta tecnología es un valioso aporte para el crecimiento de toda la población.
No obstante, es claro que se deben mejorar varios aspectos para alcanzar mayor penetración y posibilidades. Por ejemplo, la cobertura de banda ancha es el mínimo para lograr los temas básicos, fuerza laboral preparada y el uso de aplicaciones de forma eficiente.
Entonces cuando existe ese rezago y una población que no tiene las habilidades para lograr más apropiación digital, la región se nota quedada a las puertas de la Cuarta Revolución Industrial.
Así mismo, hay países que no tienen el espacio fiscal suficiente para sacar adelante los diferentes proyectos en este tipo de tecnologías. Lo que muestra una desventaja en los usos prácticos y en cómo se puede usar esta tecnología.
IA: Hablando de la mujer como parte esencial de este cambio, la IA, ¿cómo la empodera y genera oportunidades?
DG: Las mujeres suelen tener 25 por ciento menos posibilidades de adquirir las habilidades y los dispositivos que se necesitan para estar preparadas y crecer, esto se acentúa en las regiones apartadas, donde los equipos son solo para los hombres.
Entonces, esta situación genera discriminación, reducción de posibilidades en la adquisición de servicios financieros, y penaliza a las mujeres por tener menos experiencia laboral.
Ante este escenario, es muy importante abrir las oportunidades de inclusión y respeto necesarias, para que la mujer pueda encaminarse a nuevos escenarios y pueda de manera creativa crecer, usando estas tecnologías para no solo su desarrollo, sino para aportar a la sociedad.
Y para ir al contexto colombiano, que tiene una de las economías más vibrantes de la región, es claro que el país se ha dado cuenta que trabajar en y con tecnología, es uno de los temas básicos para el progreso.
No obstante, aún tenemos un atraso en infraestructura y eso limita la cobertura de banda ancha; el otro tema es que se necesita trabajar en el capital humano, que esté más preparado. Hay una brecha que se debe cerrar para abrir posibilidades de mejoramiento. Es clave que la academia converse con el mercado para brindar profesionales preparados frente a las necesidades que se requieren.
Colombia tiene un camino largo por recorrer, aunque ya ha avanzado un buen tramo. Y es claro que todos los actores del ecosistema digital deben llegar a un acuerdo para motivar el crecimiento con inclusión y desarrollo social.
IA: A manera de conclusión, ¿cuáles son los puntos clave para lograr equidad e inclusión?
DG: Es necesario pensar en estos tres puntos: Uno, definir los marcos de gobernanza, que sean claros y fuertes para el uso de la IA y la protección de las personas. Dos, que las empresas desarrolladoras, telcos y plataformas, sean responsables por el diseño de productos y servicios, esto para que no generen discriminaciones. Y tres, proveer un ecosistema digital con políticas robustas y conectadas. Basadas en un enfoque de integración de toda la sociedad, donde las capacidades de los participantes puedan trabajar de manera armónica para llevarnos a cumplir las aspiraciones de la Agenda 2030 (ONU), que al final es un mundo sin pobreza, incluyente y participativo.
